Qué ver en Mondragón: un viaje a través de la historia y la naturaleza

Un legado histórico palpable

Más allá de su belleza natural, Arrasate-Mondragón te invita a recorrer las huellas de su pasado. Su casco histórico, declarado Conjunto Monumental, te transportará a otras épocas. La iglesia de San Juan Bautista, con su majestuosa fachada gótica del siglo XV, es una parada obligada. Admira también la Casa Consistorial, de estilo barroco del siglo XVII, y el convento de San Francisco, que actualmente alberga un centro cultural.

No te pierdas el palacio de Okendo, un ejemplo de la arquitectura civil vasca del siglo XVII, ni la ermita de Santa Bárbara, ubicada en lo alto del monte Urdiaga y desde donde podrás disfrutar de unas vistas impresionantes de la ciudad.

Para los amantes de la historia industrial, una visita al Museo de la Industria es imprescindible. Aquí podrás conocer la trayectoria industrial de Arrasate-Mondragón, desde sus inicios hasta la actualidad, y descubrir el legado de la experiencia cooperativa de Mondragón.

Naturaleza para todos los gustos

Si eres un apasionado de la naturaleza, Arrasate-Mondragón te ofrece un paraíso de rutas y senderos que te adentrarán en paisajes de gran belleza. Acompañado de guías expertos, podrás explorar montañas, valles, bosques y ríos, disfrutando de una experiencia única.

Sube a la cumbre de Udalatx, el monte más alto de la región, y contempla las vistas panorámicas que te dejarán sin aliento. Recorre el camino del dragón hasta Murugain, un santuario mariano con una gran tradición religiosa.

Las minas de Gongeta también son una opción interesante para los amantes de la historia y la geología. Adéntrate en las profundidades de la tierra y descubre los secretos de este antiguo yacimiento minero.

Para los amantes del senderismo, Arrasate-Mondragón ofrece una amplia red de senderos señalizados que te llevarán por los rincones más bellos de la zona. Recorre la Ruta del Agua, que te llevará por cascadas, molinos y puentes, o la Ruta de los Montes, que te permitirá disfrutar de las vistas panorámicas de la ciudad.